Rodolfo Aguiar: “La medida de fuerza se convierte en la antesala de un paro general”
La medida de fuerza realizada por ATE el miércoles fue se dio “en rechazo a las políticas de ajuste que recrudecen en el sector público”.
El plan de lucha de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) se profundizó este miércoles con una nueva medida de fuerza realizada en todo el país y, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el sindicato se movilizó hacia el Congreso Nacional.
“La medida se da en rechazo a las políticas de ajuste que recrudecen en el sector público: además de los despidos, cierre de organismos y una incesante pérdida del poder adquisitivo, con la declaración de disponibilidad de todos los trabajadores de la planta permanente”, expresaron desde ATE.
“La medida de fuerza tiene gran adhesión y se convierte en la antesala de un paro general que tiene que llegar en las primeras semanas de septiembre. Tenemos que pensar en una profundización del plan de lucha que nos permita ponerle freno a un Gobierno que se ha decidido a atacar todos nuestros derechos y arrasar con la Constitución Nacional”, indicó Rodolfo Aguiar, Secretario General del sindicato.
El dirigente también aventuró la posibilidad de lanzar una nueva medida de fuerza general en conjunto con otras entidades gremiales: “Hay condiciones y sobran motivos para que todas las centrales obreras convoquen a una huelga. Que se queden tranquilos aquellos que siempre cuestionan a los que pelean. Si nuestros sueldos mensuales fueran de 9 millones de pesos como el de los senadores, no pensaríamos en llevar adelante estas acciones”.
“El plan económico del Gobierno no funciona ni va a funcionar. Además, los números cada vez le dan peor. Una gran mayoría de los que los respaldaron están decepcionados. Tenemos que seguir desgastándolos”, concluyó Rodolfo Aguiar.
Por su parte, la Secretaria Adjunta del sindicato, Mercedes Cabezas, apuntó: “Hoy no sólo estamos juntando firmas para decirle no al DNU 70/23, sino también para decirle a los Diputados que necesitamos el tratamiento en la Cámara Baja para que finalmente se anule un decreto que sigue operando sobre la vida de los argentinos y las argentinas, y que no tiene nada de necesario y de urgente. Hay que eliminarlo”.
