“CRUDO CRISTAL ES MI FAMILIA, MI AMIGO, MI BRONCA Y MI FELICIDAD”
Dialogamos con Gerardo Cáceres, integrante de la banda Crudo Cristal. Un recorrido por los orígenes del grupo de rock, su vida por fuera de la música, los proyectos y el lugar que ocupa en su vida, fueron algunos de los temas.
Sector Prensa se metió en el mundo del rock, en zona oeste. Entrevistamos a Gerardo Cáceres, oriundo de Libertad, quien es integrante de Crudo Cristal. El músico nos contó los orígenes de la banda, su primer nombre se basó en la publicidad de una cerveza, y los cambios que hubo. Además, adelantó que se viene el primer trabajo del grupo, su “primer bebé” como lo llamó. Otros de los temas fueron el significado de la música en su vida, proyectos a futuro y su trabajo cotidiano.
SP: – ¿Cuándo te iniciaste en la música?
GC: – Podría decirse que desde chico estuve ligado a la música, siempre fue algo que me movió el piso. A tocar, empecé a los 13 años. En el verano del ´94 o ´95, trabajé y me compré una batería. Así, junto a otros amigos formamos la banda. Básicamente así fueron los comienzos.
– ¿La banda, de ese momento, es la que hoy continúa?
– No, eso se terminó hace tiempo, pero conservo los mismos amigos de esa época. Fue una época muy linda, de aprendizaje y experiencias en todos los sentidos. Recuerdo todo eso con mucha felicidad. Haber vivido los ´90, si bien eran tiempos duros, recuerdo lo mejor. Con el tiempo dejé la batería para tocar la guitarra y cantar. Un amigo de la vida, Lucas Naranjo, agarró la batería y yo, como soy y sigo siendo cara rota, me puse a cantar. Con él, integramos hoy Crudo Cristal.
– ¿Cómo se creó Crudo Cristal?
– Hace veinte años, teníamos otra banda, con Lucas Naranjo en la guitarra y Roberto Jiménez en el bajo. Yo cantaba y tocaba la guitarra. A esa banda le pusimos Cristal 970, después de haber pensado varios nombres. Una vez en un viaje, en el tren Sarmiento, veníamos con mi esposa Natalia y vimos un cartel de Quilmes que decía “Cristal 970”. Nos gustó. Se lo propuse a la banda, y también les gustó. Esa banda se separó un tiempo, pero después volvimos con muchas ganas de tocar. Después, se incorporó Leo Pizarro, en la primera guitarra y voces, y siguió Cristal 970. Hasta que un buen día, a mi ya no me llamaba mucho la atención el nombre y venía cambiando la onda de la banda. Se me ocurrió que nos llamemos Crudo, más que nada por un tema de sonido, era crudo y bien rockero. Se los propuse, pero no querían saber nada los chicos. Después de unas negociaciones con la banda, se dio un 50 y 50. En vez de llamarse Crudo, se llamó Crudo Cristal y sacamos el 970. En el medio pasaron muchas cosas, pero ese es el origen.
– ¿Qué sucedió en el medio?
– Idas y vueltas de cada uno. No hablo de problemas entre sí, sino que la vida de cada uno fue cambiando. Yo fui papá, a los 20 años. Y los demás, eran solteros y tenían otra vida. Muchas cosas no las dejé de hacer, pero ya no podía seguir el ritmo de otros. Cuando volvimos, no paramos más. Somos cuatro personas apasionadas por la música, que sirvió para que nos juntemos y se mantenga una amistad en el tiempo. Creo que no todos tienen la suerte de nosotros, de mantener, más que a la banda, una amistad.
– ¿Tienen ayuda de alguna productora o empresa?
– No, pero tampoco lo buscamos. Por años, no salimos a tocar, hasta que nos agarró el bichito de decir que es hora. Hoy están las herramientas como para autogestionarse, no es necesario una empresa o productora, que es de mucho más ayuda. Pero creo que eso llega cuando uno ya se autogestionó, y tiene un nombre dentro del under, y la productora capta que movés una pequeña masa y te ayuda, entre comillas porque es todo dinero. Quizás más adelante nos proponen algo, veremos. Tenemos que sentarnos a ver hasta dónde queremos llegar, que queremos hacer. Eso es lo que importa, lo comercial vendrá si es que lo queremos. Quizás no lo queremos, todos los días cambian las cosas.
– ¿A dónde les gustaría llegar con Crudo Cristal o es un hobbie?
– No sé a dónde queremos llegar cada uno, pero es más que un hobbie, es un estilo de vida que nos llevará hasta donde nos tenga que llevar. Por ahora, esto hace felices y es lo que nos gusta hacer.
– ¿Es difícil mantenerse sin ayuda y siendo una banda de barrio?
– Es difícil. Nosotros no contamos con un lugar propio para ensayar, así que vamos a salas de ensayo. Si bien no es caro, uno a veces no cuenta con esa cantidad de dinero, aunque parezca poco. Pero somos una familia y nos apoyamos entre todos. Gustavo, que es parte de la banda, no tocando, sino que, en otros detalles, nos cede su casa para ensayar ya que todos nos pudimos equipar en su momento, cosa que hoy sería dificilísimo con los precios actuales. También tenemos la suerte de contar con vehículos, a veces tenemos que trasladar las cosas, sino tendríamos que pagar un flete. Los lugares donde uno toca, difícilmente se haga cargo de algún gasto de la banda.
– ¿Van a sacar su primer disco?
– Lo íbamos a presentar, pero vino la pandemia. Al día de hoy no se pudo, estamos esperando por eso. Tardamos mucho en decir “che, grabamos un disco”. Pero bueno, ya lo tenemos y en algún momento lo presentaremos, cuando pase todo esto. Nuestro primer bebé, diríamos.
– ¿Qué es el rock en tu vida? ¿Lo transmitís en tu familia?
– El rock es la música que mi sentido común eligió para el resto de mi vida, pero también me gustan otras cosas por fuera de ese género. Yo diría que la música en sí, es lo que significa algo en mi vida, dentro de eso está el rock. En mi familia se escucha música, todos tienen distintos gustos, pero conviviendo muy bien con esa diversidad musical. Mis hijas son rockeras pero no se los inculcamos, sólo les gusta por escucharnos a nosotros. También, les gusta otro tipo de música.
– ¿Qué otros proyectos hay a futuro? ¿Sueñan con tocar con una banda o cantante de renombre?
– En el futuro queremos dar pasos chicos, pero que nos sumen mucho. Queremos ser una banda que suene bien y que, si alguien nos escucha, diga eso suena a Crudo Cristal. Por otro lado, seguramente hagamos algún vídeo con algún tema del disco y después veremos cómo seguimos. Si se nos diera la oportunidad de tocar con alguien de renombre, seguro lo haríamos y con muchas ganas.
– ¿Hicieron recitales en streaming en estos tiempos?
– Si, participamos de algunos eventos que organizaron distintas personas, ya sea a beneficio de algo o sólo por placer. Pero ninguno que nosotros hallamos organizado, siempre fueron invitaciones.
– ¿Se extraña el público?
– Si, en realidad se extraña todo. Salir a tocar, los amigos, el público, compartir algo, ver gente que no ves hace mucho. A cualquiera que le preguntes te va a decir, no sé si tanto al público, sino que el conjunto de las cosas que pasan cuando uno toca.
– ¿En qué se inspiran para crear sus canciones?
– Voy a hablar por mí, y creo que por Leo, somos los dos que componemos las canciones. En realidad, no hay algo que nos inspire, sino que es el todo, lo que te toca en el momento. A veces las canciones vienen solas, con música y letra. A veces, las haces conscientemente. Otras salen como salen, si bien tienen una letra y dicen algo, no se refieren a un tema en específico, quizás es más en general. Lo que te inspira son los momentos que uno está pasando, situaciones que vivís, cosas que ves o escuchas. Ahí, tu cerebro procesa todo eso y salen esas canciones.
– ¿Cuál es tu profesión por fuera de la música?
– Después del segundario, empecé a hacer el cbc para analista de sistemas, pero dejé a mitad de año. Y al año y medio, dos años, fui papá y no volví a estudiar. Hasta hace unos cinco años, que intenté estudiar un profesorado de geografía, y tampoco lo terminé. Lo que sí te puedo decir es que, desde que tengo 22 años soy vendedor, voy por los negocios haciendo pedidos. Trabajé para buenas empresas. Te puedo decir que es un oficio, preventista le dicen. Lleva mucho aprendizaje, si bien no es una carrera, es algo que te da la calle. Lo aprendí muy bien y siempre viví de eso. Hoy en día, estoy con un emprendimiento propio. Es de lo mismo, pero en vez de ser preventista, es venta cara a cara. Tengo un reparto de galletitas, hace unos seis meses.
– ¿Crudo Cristal se adapta a la sociedad de hoy, donde quizás hay diversidad musical?
– Yo creo que sí, pero desde antes. Dentro del rock, en su momento, salieron diferentes camadas de música, alternativo, new metal y otros. Lo que tiene de bueno Crudo Cristal, es lo que nos dicen cuando nos escuchan y lo sentimos, es que no tenemos un género preciso. Coqueteamos con blues, rock and roll, heavy, punk, pop, algo de folklore. Y eso es lo que nos gusta de la banda, no se encasilla con nada ni nadie. Y al que le gusta, bien, y al que no, también. No buscamos gustarle a un público.
– ¿Cuál es tu canción preferida de la banda?
– Tengo varias, pero “descarga tu veneno” es de mis preferidas, tiene una cierta rabia que me vuelve loco. Creo que la preferida de la banda, porque se genera una comunión rabiosa, hermosa.
– ¿Qué es Crudo Cristal para vos?
– Crudo Cristal es mi familia, mi amigo, mi bronca y mi felicidad. Por fuera de mi familia, es lo que me hace feliz y me acompaña en todo momento. Pero por sobre todo, Crudo Cristal es rock, en todos los sentidos.
Por: Ezequiel Olivera