El desempleo del primer trimestre fue de 7,7%: trepó 2 puntos del que dejó Fernández
El dato publicado por el Indec es el primero medido por completo durante el Gobierno de Javier Milei.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó este lunes que en el primer trimestre de 2024 la desocupación alcanzó al 7,7% de la población, lo que marcó dos puntos porcentuales por arriba con respecto al trimestre anterior, durante la gestión de Alberto Fernández.
El índice, que se registró para los meses de enero, febrero y marzo, es el primero medido por completo durante el Gobierno de Javier Milei, y muestra un ascenso de 0,8 puntos porcentuales si se compara con el 6,9% registrado en el primer trimestre de 2023.
Los datos, que marcan en parte el impacto de la recesión, reflejan que alrededor de 1,7 millones de personas de la población activa están desocupadas, lo que implicaría unas 525.000 más solo en el primer trimestre del año. Es el nivel de desempleo más alto desde el segundo trimestre de 2021 cuando la economía aún salía de los efectos de la cuarentena estricta y las restricciones a la actividad económica.
El último trimestre del año pasado, la tasa de desocupación en la Argentina había alcanzado el 5,7% y había mantenido el nivel alcanzado en el tercer trimestre (cuando se registró idéntica cifra).
Durante el período enero-marzo de este año, las regiones que mostraron las mayores tasas de desempleo fueron el Gran Buenos Aires (9%) y la región Pampeana (6,8%). En tanto, la región con menor tasa de desempleo fue Cuyo (4,5%).
Mientras que la tasa de desocupación fue superior en mujeres (8,4%) que en varones (7%), siete de cada diez personas desempleadas cuentan con secundario completo y el 28,3% lleva más de un año buscando empleo.
Dentro de la población ocupada (44,3%) se destacó que el 74,7% son asalariados, pero de ellos el 35,7% no cuenta con descuento jubilatorio. Por otra parte, el 21,9% es cuentapropista, el 3,2% son patrones y el 0,3% son trabajadores familiares sin remuneración.
Entre los asalariados ocupados, el 4,3% utilizó sus propias maquinarias/equipos para realizar su trabajo. Al mismo tiempo, del total de ocupados, el 7,6% trabajó desde la vivienda. Este dato, que podríamos emparentar con el home office, viene cayendo trimestre a trimestre desde la pospandemia, señal que la vuelta a la presencialidad es cada vez más firme.