jueves, enero 30, 2025
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La industria sigue en rojo: acumula una caída de 9,7% en once meses de 2024

Datos de la UIA muestran mejoras puntuales según datos de noviembre, pero señalan que el “panorama es desafiante”.

La actividad industrial registró en noviembre una baja anual de -3,8% interanual y mensual respecto de octubre de -2,5%, (sin estacionalidad). De esta forma en el acumulado de enero a noviembre se observó una disminución de -9,7% interanual, según el informe de la Unión Industrial Argentina (UIA).

Los datos preliminares de diciembre, mientras tanto, son dispares y la central fabril alerta por la pérdida competitividad y la apertura de importaciones. Además de una demanda deprimida, la retracción se da en un marco en que la industria observa “una alta carga impositiva local, falta de infraestructura, falta de financiamiento, costo de la energía y una historia de inestabilidad macroeconómica”.

En tanto, en noviembre la industria comenzó a mostrar una cierta recuperación pero aún se observa una marcada heterogeneidad. El informe precisó que “se registraron alzas interanuales en el sector Automotor (2,8%), despachos de cemento (11,1% i.a.), y los rubros vinculados sector agrario como es el caso de Patentamiento de Maquinaria Agrícola (9,4%). También mejoró la liquidación de divisas del sector aceitero (57,8%), dado el buen desempeño en la producción de molienda de oleaginosas que impulsó al sector de Alimentos y bebidas.

En este mismo sentido, se observaron incrementos en las exportaciones hacia Brasil (40,2%), donde se destacó los despachos de productos de origen industrial como la producción automotriz, y otras de origen agropecuario como el trigo y centeno. También crecieron las importaciones desde Brasil (55,2%). En sentido inverso, continuó en diciembre la baja interanual en el consumo de energía eléctrica de Grandes Usuarios Industriales (-8,7%).

La UIA señaló que “si bien comenzaron a observarse ciertas mejoras en sectores de la industria durante el cuarto trimestre, a nivel agregado la industria se ubica aún en niveles similares a noviembre de 2023, donde el sector industrial enfrenta un panorama desafiante, marcado por la competencia frente a la importación de bienes terminados y las dificultades de competitividad de la economía argentina”.

Medidas antidumping

En este contexto, la UIA se manifestó contra las modificaciones en los plazos de las medidas antidumping. Explicaron la importancia de estas en tanto que “nivelan la cancha frente a la competencia desleal”, sobre todo de los países asiáticos.

Puntualmente, se refirieron a las medidas que el Gobierno introdujo la semana pasada, mediante las cuales modificaron plazos para iniciar investigaciones sobre productos sospechados de competencia desleal.

Días atrás, el ministro Luis Caputo anunció que Argentina modificará el sistema antidumping con el objetivo de “estimular la competencia y reducir los precios”. El nuevo paquete de medidas antidumping entró en efecto por medio del Decreto 33/2025.

El ministro sostuvo que las normas antidumping, diseñadas para prevenir prácticas desleales en la competencia entre productos importados y locales, generaron un impacto negativo al incrementar tanto los precios al consumidor como los costos de producción industrial.

Desde la UIA aseguraron a través de un comunicado que “las modificaciones en los plazos de las medidas antidumping incorporan elementos positivos para hacer más ágil y eficiente este mecanismo contra la competencia desleal, especialmente de países asiáticos”.

Pero la entidad también puso el foco en el peso de los impuestos. “La combinación de estrategias comerciales desleales de algunos países y la alta carga impositiva local, falta de infraestructura, falta de financiamiento, costo de la energía y una historia de inestabilidad macroeconómica, explica la diferencia entre algunos productos similares”, indicaron.

Como ejemplo, la UIA apuntó a la situación de una PyME local que produce en un municipio con altas tasas municipales, paga ingresos brutos en cascada en todo su proceso productivo, cuenta con una carga impositiva de las más altas del mundo y exporta impuestos, paga la logística el triple que otros países y con altísimos costos financieros. “¿Cómo podría competir con economías donde se subsidia la materia prima y prácticamente no hay leyes laborales?”, se pregunta la entidad.