Incidentes en la municipalidad de Moreno en la protesta por el crimen del repartidor
Familiares y amigos del repartidor Lucas Aguilar se congregaron para reclamar por el esclarecimiento de su asesinato. Los manifestantes apedrearon móviles policiales, intentaron prenderlos fuego y quemaron neumáticos. La Policía les arrojó balas de goma y gas pimienta. Hay al menos 15 detenidos.
Familiares y amigos de Lucas Aguilar, el joven asesinado de siete puñaladas mientras intentaba defender a un vendedor ambulante, se congregaron frente a la municipalidad de Moreno y reclamaron por el esclarecimiento del caso. Los manifestantes apedrearon móviles policiales, intentaron prenderlos fuego y quemaron neumáticos. Oficiales y efectivos de civil dispararon balas de goma y arrojaron gas pimienta para dispersar la protesta. Hay al menos 15 detenidos.
En la protesta los compañeros, parientes y vecinos de Lucas Aguilar prendieron fuego gomas y conos de seguridad frente al edificio de la municipalidad de Moreno, ubicada en la calle Eduardo Asconape 51. Al tiempo, se enfrentaron con la Policía.
Los compañeros del repartidor asesinado querían acercarse a la intendencia, pero los efectivos les arrojaron gas pimienta mientras trataban de apagar el fuego.
La novia de Aguilar fue una de las afectadas por el gas. Momentos después, algunos de los protestantes apedrearon una camioneta de la Municipalidad.
En ese marco se supo que hubo 15 detenidos, que fueron trasladados en una camioneta de la Policía.
Tras los incidentes, una veintena de motos quedó desperdigada sobre la vereda de la plaza ubicada frente al edificio municipal y sobre el asfalto de la calle Asconape. También quedaron tirados bolsos y mochilas de los repartidores, varios de los cuales fueron robados por personas que no participaban de la manifestación.
La palabra oficial
Ismael Castro, secretario de Seguridad de Moreno, habló tras los disturbios: “Empezaron a destruir móviles, incendiaron cubiertas, se desmadró la situación y la Policía quiso frenar la violencia”.
“Se estaba poniendo muy tenso el clima y por eso la Policía procedió a desactivar el conflicto”, sumó el funcionario en diálogo con La Nación.
Castro también confirmó que la intendenta Mariel Fernández estuvo adentro del edificio municipal mientras ocurría la protesta. “Estamos en contacto con la familia de Lucas. Su crimen no fue en ocasión de robo”, concluyó.