BERNI SOBRE EL ASESINATO DEL KIOSQUERO: “NO FUE UNA CUESTIÓN POLICIAL”
El ministro de seguridad bonaerense habló tras el crimen en Ramos Mejía y defendió a la policía que arrojó gases lacrimógenos en la marcha.
El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires salió defender su gestión con un intento de descargar la responsabilidad en la Justicia y en la propia sociedad, tras la marcha realizada en Ramos Mejía por la inseguridad.
“Yo asumo la parte que me corresponde, pero la seguridad no es un concepto abstracto, es una construcción colectiva, multidimensional y con diferentes factores que intervienen, que empiezan con la educación de la familia, con el colegio, con los valores, con la contención social y con el trabajo”, dijo el ministro en declaraciones periodísticas.
En un intento por concentrar las miradas en el accionar del Poder Judicial en cuanto a penas y excarcelaciones, Berni pidió “que la Justicia se alinee” con la demanda social de mayor seguridad y con el accionar de las fuerzas de seguridad.
En cuanto al kiosquero Roberto Sabo, un hombre de 48 años asesinado durante un robo a su comercio en el centro de Ramos Mejía, a escasos metros de la comisaría local, el ministro aseguró que “el 85 por ciento de estos delitos son producidos por gente reincidente”.
Leandro Suarez, detenido por el crimen de Sabo, “había sido juzgado y sentenciado”, indicó Berni, antes de señalar que de todos modos estaba libre y ese “es el principal problema”.
Suárez cumplió entre 2014 y 2020 la totalidad de su condena a 5 años y 10 meses por un asalto con armas.
“En el acta de detención de este asesino figura que el 4 de octubre, hace un mes, fue nuevamente detenido por la Policía cuando intentó robarle a una persona. Se le dio aviso a la Policía, salimos a buscarlo, lo identificamos, lo encontramos, lo notificamos y lo dejaron en libertad”, se quejó Berni.
LOS VECINOS DE RAMOS MEJÍA MARCHAN PIDIENDO JUSTICIA POR EL ASESINATO DEL KIOSQUERO
Por otra parte, Berni se refirió a la represión en la marcha de Ramos Mejía, donde los vecinos pidieron justicia y más seguridad: “Tuvimos que tirar gases porque si la gente prende fuego la comisaría se calcinan todos los detenidos”, aseguró.
