EDUARDO DONZA: «LO QUE HACEMOS BIEN EN UN AÑO, LO DESTRUIMOS AL OTRO»

abril 1, 2022 Redacción Sector Prensa

El investigador del Observatorio de Deuda Social Argentina, explicó que la pobreza ha disminuido pero que aún resta trabajo por hacer.

La pobreza disminuyó a un 37,3% en la Argentina, el menor porcentaje desde que comenzó la pandemia, luego de estar por encima del 41%. Eduardo Donza, investigador del Observatorio de Deuda Social Argentina, habló sobre esta situación en un medio radial. Si bien dejó en claro que se va por buen camino, señaló que todavía se deben hacer cosas.

«Lamentablemente, estamos empezando a pasar el sacudon de la pandemia. Pero todavía no recuperamos los niveles de pobreza, que ya eran elevados. Lo más serio es la cuestión estructural, en Argentina hace varias décadas que no podemos perforar un 27% o 28% del nivel de la pobreza. Eso se hace una problemática estructural, no depende de la coyuntura, no es sólo una cuestión de ingresos, viene de viviendas en malas condiciones o salud precaria en las familias. También, servicios en la vivienda como agua potable y la red de cloacas. Después hay un tercer factor, que es la inflación, el aumento de precios casi descontrolado en el marco de la invasión rusa. El aumento de los alimentos por encima del índice general, es muy perjudicial. Esas son cuestiones muy complejas de resolver en el corto plazo», explicó en Radio Búnker 94.9, en el «Tanke de Búnker» (lunes a viernes, de 10 a 13hs).

«Lo primero que debemos hacer es focalizar, hay que hacer muchas cosas, pero hay que controlar la inflación. Después una política de Estado, que sea consensuada con los sectores de la producción, y que aumente la riqueza de una manera sostenida. Eso no hemos logrado, tenemos como un zig zag. Cuando vemos la evolución del PBI es como un electrocardiograma, lo que hacemos bien en un año, lo destruimos al otro. Esos problema se agravaron con la pandemia, pero ya eran preexistentes», agregó.

Donza, señaló desde cuando ocurre que un trabajador en blanco se mantiene debajo de la línea de la pobreza: «Se empezó a dar cuando empezó el factor importante de la pobreza, desde la década del ´90. Se fue agravando cada vez más, y atenta contra de uno de los estereotipos o sentido común, de que alguien tiene un trabajo y no va a pasar privaciones. Lamentablemente, esto no es más así. Casi el 30% de los trabajadores ocupados, viven en lugares pobres».

Con respecto a la caída de la indigencia, explicó: «Este concepto de pobreza, que es complejo, hay varias formas de medirlo. En América Latina la más tradicional es por ingresos, lo que ingresa en el hogar. Lo más pobres entre los pobres son los que viven en la indigencia, los ingresas que declaran no les alcanza para los alimentos. Ese valor es importante, descendió de un 10% a un poco más del 8%. Pero pensemos que hay casi 1 de cada 10 que, en el hogar no tiene los ingresos monetarios suficientes para subsistir minimamente. Eso es una baja, hay que festejarlo, pero nos queda un porcentaje muy grande. Ahí son eficientes la políticas de transferencias de ingresos, la AUH, y los programas de transferencias, sino ese valor aumentaría hasta cerca de un 18%. Para vivir dignamente, tiene que mejorar el mercado de trabajo».