MONÓXIDO DE CARBONO: UN ENEMIGO INVISIBLE EN ÉPOCAS FRÍAS
Carlos Damin habló sobre los peligros que representa el monóxido de carbono. Además, indicó formas de evitar intoxicaciones.
Llegan las épocas más frías del año y muchas personas buscan resguardarse de las bajas temperaturas, sobre todo de la ola polar de esta semana. Por eso, utilizan artefactos a gas que mitigan el frío, pero que pueden resultar un verdadero peligro en ocasiones. Carlos Damin, especialista en toxicología, se refirió a las intoxicaciones por monóxido de carbono y dio algunas recomendaciones para evitarlo.
«Hay muchas intoxicaciones todos los años en esta época, sobre todo en días fríos como los que estamos viviendo en esta semana, y tenemos mucha muertes, que son absolutamente prevenibles. Si la gente toma conciencia de que en días fríos como estos hay síntomas simples como mareos, dolo de cabeza, nauseas o vómitos, no tienen que pensar en otra cosa que monóxido de carbono. Pensar con qué están calefaccionando la casa, abrir las ventanas, todos los artefactos que produzcan llama pueden generar monóxido de carbono. El calefón, el horno y las estufas a gas, son algunas. Es importante que hagan revisar los artefactos por gasistas matriculados», señaló Damin en Radio Búnker 94.9, en el «Tanke de Búnker» (lunes a viernes, de 10 a 13hs).
La diferencia entre la fuga de gas y la intoxicación por el monóxido de carbono: «Es importante diferenciarlo, porque hay un error frecuente que se comete, es decir que la gente muere por un escape de gas. El monóxido de carbono no es un escape de gas, está en las llamas. El gas de red tiene olor para que se identifique, el monóxido no. Además, produce una sensación de bienestar, entonces la gente se acurruca, siente frío, se acerca a algún artefacto, y ahí es donde comienza la parte grave», explicó.
El profesional en toxicología insistió en la revisión de los artefactos de gas y dio recomendaciones: «Hay que hacerlos revisar por un gasista matriculado. Tener cuidado si se usa brasero. No dormir nunca con un artefacto prendido, es preferible una frazada más y apagarlos, salvo que sean eléctricos. Mantener siempre las ventanas abiertas. Y si uno, en días de frío siente dolor de cabeza, nauseas, vómitos o mareos, lo primero que debe pensar es en monóxido de carbono».
«La intoxicación puede provocar la muerte, a veces, en menos de cinco minutos. Por eso, es muy importante que la gente tenga en claro el peligro que el monóxido representa. No se puede subestimar nunca. Hemos visto muertes producidas en segundos», remarcó.
El color de la llama: «La llama amarilla de una hornalla, por ejemplo, es ahí donde se produce el monóxido de carbono. A veces la llama del horno no se ve, igual que la del calefón», indicó.
Damin afirmó que la intoxicación es muy común en esta época: «Tenemos alrededor de 200 muertes cada año, son absolutamente evitables en el país. Son muchas muertes».
«En clases medias y humildes, que tienen tiro balanceado o calefones, ahí es donde tenemos los problemas», agregó.
Las secuelas luego de la intoxicación: «Va a depender de la velocidad que logró hacer el diagnostico. Si se hace rápido y con el tratamiento adecuado, normalmente no hay secuelas. Si fue importante, es posible que las haya, pueden ser neurológicas y permanentes», explicó.
“LA ÚNICA PERSONA QUE TIENE LA CAPACIDAD DE RECOMPONER LA ESPERANZA DEL PUEBLO ES CRISTINA”