Moreno: buscan desesperadamente a una mujer, la última vez que la vieron fue el 8 de noviembre
La mujer, de 42 años, fue vista por última vez cuando salió de su casa en Trujui. Su novio fue detenido, pero por tenencia ilegal de arma.
Desde hace una semana, familiares y amigos buscan desesperadamente a Susana Cáceres. La mujer, de 42 años y madre de cuatro hijos, lleva 9 días desaparecida. La última vez que la vieron fue el 8 de noviembre pasado, cuando salió de su casa en la localidad de Villa Trujui, partido de Moreno, cerca de las 16. “Ahí vengo, má”, le dijo a su madre antes de irse a pagar una deuda, con dinero de la venta de dos electrodomésticos. Pero Susana jamás regresó.
Este martes, en medio de diversos operativos para dar con el paradero de la mujer, detuvieron a Alberto Peralta, el novio de Susana Cáceres. El hombre quedó detenido por tenencia de arma de una arma calibre 45 y encubrimiento porque el revólver tenía pedido de secuestro en el marco de otra investigación.
Mientras la Justicia aguarda la pericia balística del arma, Peralta, que tiene antecedentes por robo agravado, permanecerá detenido. El hombre se negó a declarar.
El martes se realizaron cuatro rastrillajes en distintos lugares: en el domicilio de Susana Cáceres; en el de Alberto Peralta; en la canchita Los Apaches y en el barrio Candia. Hasta el momento los resultados fueron negativos. Además, se ordenó peritar la camioneta de uno de los hermanos de Alberto Peralta, donde encontraron una pequeña mancha roja en una zapatilla y una remera, aunque aclararon que “podría ser pintura” y que “hay que analizarlo”.
La investigación por la desaparición está en manos de la fiscal Luisa Pontecorvo, titular de la UFI N° 3 de Moreno quien, además, ordenó un relevamiento de cámaras públicas y privadas y del teléfono celular de la mujer que, aunque no funcionaba, podría dar indicios sobre sus últimos movimientos, así como así también los previos al momento de su desaparición.
Susana Cáceres tiene tez trigueña, cabello largo color rubio, mide un 1,50 metros, y luce dos tatuajes en ambos brazos, pierna y otro símbolo de la marca Chevrolet en su mano, de quien es fanática, según su prima Adriana Herbas.
La última vez que fue vista en el barrio iba camino a la plaza Mariló, en Moreno, y vestía un short de jean azul y zapatillas negras.
Desde su círculo sostienen que la mujer jamás se había ausentado tanto tiempo del hogar. Por eso, cuando notaron que el martes no regresaba ni lograban contactarse con ella, denunciaron la desaparición.
Susana tiene cuatro hijos de los cuáles solo la menor, una beba de 18 meses, vive con ella. Según allegados, en marzo pasado, la mujer había terminado una relación con el padre del más pequeño, y por eso se había vuelto a vivir con la madre.
De acuerdo con el testimonio de su prima, Susana “no tenía un empleo y se había separado hacía unos meses de su ex, con quien no tenía una buena relación”. Justamente, para mantener a la bebé, Susana había vendido una cocina y una heladera en una feria barrial.