Una madre denuncia que su hija falleció por mala praxis en el Hospital Posadas
Lorena denunció que el personal médico no atendió de manera correcta a su hija Milagros, de 22 años, quien falleció en octubre pasado y padecía Piruvato Carboxilasa.
Milagros es el único caso de una persona con Piruvato Carboxilasa que superó los seis meses de vida, llegando a vivir 22 años. Sin embargo, de acuerdo al testimonio de su madre, Lorena, una mala praxis derivó en el fallecimiento el pasado 16 de octubre. La historia de vida, aquella última internación y la denuncia hacia la guardia del Hospital Posadas.
«Mili nació en el Hospital Posadas. Sabíamos desde el embarazo que venía con un problema, pero realmente pensábamos que era otra cosa, algo como una hidrocefalia. Pero a los tres meses, entró en terapia intensiva, muy grave. La sangre se intoxica porque le empieza a faltar glucemia, bicarbonato, que es lo que da oxígeno a la sangre, y eso es lo que hace que ella llegue al punto de descompensarse. Lo que debe hacer un médico es controlarla y darle todo lo que necesita, para mantener sus órganos estables. Sino la sangre no llega a sus órganos, entra en coma, tiene un paro cardíaco o muera», explicó en Radio Búnker 94.9, en el «Tanke de Búnker» (lunes a viernes, de 10 a 13hs), sobre la enfermedad que padecía su hija.
«Milagros superó los cinco años, tuvo un Port a Cath, que es algo interno para que puedan inyectarla cada vez que ella entre, para compensarla. Yo viajaba una hora y media con ella y avisaba a los médicos, entonces ellos la esperaban», contó.
Lorena detalló cómo fue la internación domiciliaria de Milagros: «Ella tenía que comer, le habían dado una bomba, y la atendía yo en mi casa. La internación domiciliaria se la hacía yo. Me fijaba la bomba, le medía la glucemia, ella estaba bien. Esa bomba, le daba todo lo que a ella le faltaba en su cerebro, porque es como una fábrica».
Por otra parte, remarcó que el caso de su hija fue único: «Es único porque no se llega a diagnosticar, porque muere antes. Ella como supero eso, llegó hasta Estados Unidos su biopsia de piel y músculo, y se logró saber que es el único caso».
La madre de Milagros recordó aquel episodio del 10 de octubre y denunció: «Milagros, después de 17 años, tiene una descompensación pero ya no es pediátrica, es adulta. Llamé a la terapia pediátrica para avisar, el médico me dijo que cuando llegáramos a la guardia le avisamos, igual estaba la historia clínica. La primera atención de la guardia me felicitó por llevarla siempre a tiempo. Hubo que hacer una tomografía por si era algo diferente a lo que tenía, salió normal. Se suponía que debía ser que estaba un poco deshidratada, es un síntoma de la enfermedad, y el bicarbonato estaba a nivel. Se iba a compensar sólo cuando la hidrataran. Eso fue el 10 de octubre, a las 19hs. Hasta el martes a las 8hs, que la sacaron de ahí, no entendí por qué, me la pusieron en un lugar de cirugía con una camilla y computadora. Después la pasaron a habitación. Nunca más vi un médico».
«El miércoles recién veo un médico, me dice que Mili estaba muy grave, muere. Le dije que lo sabía por todo ese tiempo que nadie la fue a atender, yo la veía como agonizaba. El miércoles me dijeron que había que ponerle respirador, pero el martes a las 3 de la mañana no la entubaron enseguida. Me dijeron que tenían que hacerle diálisis, pero Mili no tenía ningún problema de riñón o pulmones, sólo su enfermedad de base. Me dijeron que no resistió la diálisis, que había que ponerle un neumotórax. Ella era hipoglucémica, y ahí estaba hiperglucémica. Estaba todo totalmente descontrolado», describió sobre el estado de salud de su hija y la atención del hospital.
Lorena afirmó que no recibió explicaciones el día en que falleció su hija: «Nadie me dio una explicación. El 16 de octubre, cuando falleció, me llaman a los 8hs para decirme que entró en paro y no la pudieron salvar».
«Yo no voy a parar, aparte me dijeron conflictiva, a una madre con el único paciente vivo, porque nunca entró más nadie. No tuvieron empatía, no tuvieron amor, me han tratado de la peor manera en mi vida», expresó.
«Hice la denuncia porque desde el día 1 hasta esa última internación, es la única diferente. Siempre fui corriendo para que puedan compensarla. La denuncia es para la guardia», dijo.
«No entiendo porque me la abandonaron. No era su momento, pero no le quedó otra que irse, porque como había quedado. No podía respirar, la medicación estaba al máximo como la respiración. Desde el hospital no hubo ninguna respuesta», reveló.
