LUIS MARGANI, DE LA MÚSICA A UNA GRAN TRAYECTORIA COMO ACTOR
Luis Margani le contó a Sector Prensa como fueron sus inicios en el cine y la actuación. Reveló cual era su profesión anterior, y que incluso llegó por casualidad a ser actor. También, habló de la famosa serie “El Presidente”.
Todos conocemos hoy a Luis Margani y su trayectoria en la actuación, pero en su mente no estuvo siempre planeado llegar a esa profesión. De estar en una banda de rock a llegar casi por casualidad a ser actor. Sector Prensa dialogó con él para que nos cuente su historia e inicios, además mencionó temas como la popularidad de la serie “El Presidente”; donde aseguró que le tocó el papel más difícil de su carrera, interpretar a Julio Grondona.
SP: – ¿Cómo comenzaste con la actuación? ¿Era algo que buscabas desde chico?
LM: – No, nunca pensé en llegar a ser actor, ni siquiera me preparé para esto. Tuve la suerte de que el director de cine Pablo Trapero, es el hijo de un amigo mío, de muchos años, me invitó a hacer un cortometraje. Le dije que yo no era actor y no sabía, que nunca lo hice. Me dijo que no había problema. Lo hicimos en el año 1993, 1994 o 1995, en uno de esos tres años, seguro. El cortometraje se llamaba “Negocio”. Lo presentó en varios festivales del mundo, y hemos ganado muchos premios con ese corto. Después de eso, al año o dos años, me convocó para hacer un largometraje, “Mundo grúa”. También, con esta película ganamos muchos premios. Yo gané el Condor de Plata, en 2000. En 1999, gané un premio a mejor actor. El destino me hizo encontrar con el actor.
– ¿Cuál es la película o serie que más recordás o te recuerda la gente?
– En cine, “Mundo grúa” es la película de la que hasta hoy me siguen hablando y preguntando. Mucha gente me dice que les gusta, y pasaron 21 años. Y ahora la novedad, la miniserie de “El Presidente”, que trata sobre el FIFA Gate, todavía la gente me sigue preguntando. Todavía sigo haciendo notas, desde el 5 de junio del año pasado. Es impresionante. Todas las entrevistas que me pidieron, las acepté. Sea cual sea el medio. Gracias a Dios, tengo una repercusión impresionante con esta miniserie.
– ¿Te imaginabas esa repercusión que tiene “El Presidente”?
– No, para nada. Fue una sorpresa enorme, que me hace muy feliz. Contento con este laburo y los de la televisión, como “Viudas e hijas del rock and roll”, “Collar de esmeralda”, participaciones en “Tumberos”. Ando afortunado en esto de la actuación, gracias a Dios.
– ¿Alguna anécdota en tu carrera?
– Hay una que recuerdo siempre, creo que fue en 1999 o 2000. Era la primera vez que hacía un trabajo en televisión, estaba con Pablo Echarri y Nancy Dupláa, en la novela “Los buscas de siempre”. Me llamaron para tener unos buenos “bolos”, estuve trabajando más de dos meses ahí. Yo no sabía como era grabar una novela. Cuando llego en el día de la grabación, me preparé y estudié la letra a más no poder, pero estaba con ese temor de cómo hacer. Y llegó la escena que me tocaba a mí, y antes de empezar lo agarré al director, le dije que me dé una mano porque debutaba en tele con él. Me dio una confianza enorme, una alegría. No sabés lo linda que salió esa escena. Yo hacía de preparador físico de un equipo de fútbol.
– Antes de que conociéramos al Luis Margani actor, ¿qué profesión tenías?
– Fueron muchos los trabajos que hice. Yo era músico, pero cuando ya no me rendía, no me daba réditos y pasaba hambre, empecé a hacer otras cosas. Pero después hice algo que me fue muy bien, lo último antes de ser actor, tenía un taller de electricidad del automóvil. Me iba muy bien, pero prioricé la actuación, esta profesión que me sorprendió y me complace mucho. Yo soy técnico de electricidad, me recibí, pero no hice un estudio completo, el secundario lo hice hasta cuarto año. Después hice cursos, aprendí bastante.
– Por lo que me contás, también tuviste tu época difícil ¿no?
– Si, como todo ser humano. Tenés épocas buenas y malas. Está escrito en la biblia, dice que tenés la época de las vacas flacas y la época de las vacas gordas. Lo importante es pegarle para adelante. Resolver los inconvenientes, nunca bajar los brazos, hacerle frente a la cosa y disfrutar cuando llegan las buenas épocas. En el corralito del 2000, estuvimos sin laburo mucho tiempo. Ahora tenemos la pandemia, desde que comenzó se paró todo. Ahora, terminé una película, hace un mes atrás. Pero nunca aflojé, eso no quiere decir que no haya tenido malos momentos. Los malos momentos no me voltean, esto no quiere decir que me los tomo en chiste, pero les hago frente. Los problemas se solucionan. Pienso en cuántos problemas tuve en la vida, hoy tengo 72 años, y todo se resolvió, por qué no se van a resolver los que vienen.
– ¿Cuál es el papel más difícil que te tocó hacer en tu carrera?
– El anteúltimo. El de la miniserie “El Presidente”, que tuve que interpretar a Julio Humberto Grondona. ¿Por qué el más difícil? Una cosa es armar un personaje, al cual vos le pones todos los ingredientes que sea, y nadie conoce. Puede gustar o no. Este era un personaje difícil, porque todo el mundo lo conoce muy bien. No hablo sólo de Argentina, sino del mundo, esta miniserie fue a todo el mundo. Interpretar a un tipo que todo el mundo conoce, o les gusta, y quedas como un rey, o te hundís eternamente. Tuve que trabajar mucho, prepararme, investigarlo, estudiarlo. Lo mejor de todo es que no tenía que imitarlo. Que cuando me vean en el personaje, estén convencidos de que yo soy Julio Grondona. Fue un desafío hermoso.
– ¿Cómo fue interpretar a alguien como Julio Grondona? ¿Cómo te llegó la propuesta?
– Este personaje no fue joda. Yo tengo un parecido a Grondona, eso me ayudó bastante. Cuando me encuentro con el director Armando Bó, me dijo que ya tenía mucho de Grondona y no quería que lo imite. Fue desobediente en algo, le copié algunos gestos. Pero no copié la voz. Mucha gente creía que hablaba igual, pero cuando escuchas al Grondona de “El Presidente” y el real, hay una diferencia. Laburé siete meses para hacer el personaje. Yo estaba convencido que hice el personaje, pero quería saber si estaba convencido Armando Bó, porque tuvimos muchos ensayos antes de empezar a grabar. Me tocó ir a Chile, llegué al set de filmación para la primera escena, imagínate la inseguridad que tenía. La primera escena la hago con Andrés Parra, un actorazo y gran persona. Terminamos de grabar el primer plano y viene Armando Bó, me dijo que eso era lo que quería. Él me dijo que me ayudara con algunas películas para interpretar al personaje, entre todas las que me marcó estaba “El Padrino”, con Marlon Brando. Cuando lo vi, dije ya está, lo tengo todo. Yo llegaba al set de filmación, en Chile, habría 150 o 200 personas en el lugar, y todos me decían “hola Don Julio”. Eso me ayudaba a creer que era Grondona.
– ¿Qué opinión tenés del cine argentino?
– Acá se hacen muy lindas películas, también muy feas. Cuando digo fea, no quiero decir mala, sino porque a mí no me gusta. Yo no soy de decir que una película es mala porque no me gustó. Hay películas realmente muy buenas, pero a mí no me gustan. Lo que pasa, es que sabemos del cine norteamericano, pero debe haber películas malas allá. No te creas que hacen todo a la perfección. Los que traen las películas acá, van a traer siempre las mejores, siempre vamos a ver esas. Otra cosa, no nos vamos a comparar con otros países, porque nosotros estamos haciendo cine de milagro. Con dos mangos y una producción que es imposible que se parezca a los del norte. Admiro lo que se hace con bajo presupuesto y sin la tecnología de ellos, yo soy feliz con el cine argentino. Me gustan las películas de Campanella, Trapero o Adrián Caetano. Ganamos hasta un Oscar, tenemos un buen cine.
– ¿Cómo eras de chico? ¿Venís de familia italiana?
– Era travieso, los volvía locos a mis viejos y hermanos. Si, vengo de una familia italiana. Es más, soy italiano, nací allá. De muy chiquito estoy en Argentina. Conocí Italia en 2015, un viaje que hice yo, me emocionó mucho. A los dos años vine para Argentina. Como digo siempre, mi nación es Italia, pero mi país es Argentina. Argentina me dio todo.
Por: Ezequiel Olivera